El crecimiento económico acumulado de México en los primeros cinco años del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, prácticamente duplica lo alcanzado en el mismo periodo de la administración anterior.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2017, el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció 2.1 por ciento a tasa anual en términos reales, de acuerdo con estimación oportuna.
Así, por primera ocasión en los últimos cuatro sexenios, se ha registrado un crecimiento positivo a tasa anual en todos los años.
De 2013 a 2017, el crecimiento promedio anual del PIB fue de 2.5 por ciento, el más alto en lo que va del presente siglo, pues de 2001 a 2005 el alza fue de 1.45, mientras que de 2007 a 2011 fue de 1.39 por ciento.
En tanto, el crecimiento acumulado en los primeros cinco años de la presente administración prácticamente está duplicando el alcanzado en el mismo periodo del año anterior, al ubicarse en 13.1 por ciento, contra 7.4 entre 2001 y 2005, y 6.8 por ciento de 2007 a 2011.
Además, la deuda pública como porcentaje del PIB disminuyó en 2017, lo cual no ocurría desde hace 10 años, y es reflejo de finanzas públicas sanas, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Tomando en cuenta el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público, el año pasado la deuda pública equivalió a 46.2 por ciento del PIB, contra 48.7 en 2016 y 46.6 en 2015.
Además, por primera vez en nueve años, se tiene un superávit primario en las finanzas públicas el cual, de acuerdo con el Balance Primario de las Finanzas del Sector Público, fue de 1.4 el año pasado, contra -0.1 en 2016, -1.2 hace tres años y -1.1 en 2014.